3º EL RIEGO DURANTE LA Etapa DE CRECIMIENTO Sin duda el consejo más importante y determinante, desde que nuestra semilla germine hasta que muestre su sexo tirando los primeros pistilos deberéis regarla con poquísima agua.

Evidentemente, el factor estrella influirá directamente sobre nuestra planta por lo que la cosecha obtenida si se siembra en extranjero en invierno será muy inferior a la que obtendremos si sembramos esa misma variedad durante los meses de verano.

Esto le permite pasar rápidamente por varias sesiones de cultivo sin comprometer la calidad ni los resultados.

Es similar a las consecuencias que sufre una planta cuando está expuesta al estrés. No se llega a desarrollar al 100%.

Recuerda que tanto las semillas autoflorecientes como las de fotoperiodo pueden feminizarse. Si lo que más te importa son los grandes rendimientos y la potencia, las semillas feminizadas probablemente te atinarán mejores resultados.

Muchos cultivadores no saben cuando emprender a abonar y por eso no usan fertilizantes. Lo ideal para este tipo de semillas es principiar al inicio del período de floración. Siempre y cuando se use un sustrato previamente fertilizado que aporte a la planta la energía necesaria para los pocos díTriunfador de crecimiento que tendrá.

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La producción media de estas plantas oscila entre los 30 y 60 gramos, dependiendo evidentemente de la variedad escogida. Las autoflorecientes necesitan mucho Sol u horas de vela para alcanzar buenos cogollos y producción.

La selección de parentales de las semillas autoflorecientes tiene lugar en todas las generaciones, y comienza en cuanto germinan las semillas. Ya en la etapa de plántulas son eliminadas todas aquellas en las que observemos malformaciones o cualquier tipo de defecto. Durante el crecimiento seguimos con la selección de parentales, eliminando todos aquellos individuos que muestren caracteres no deseables para los fines buscados.

Y como receptores del polen utilizamos el clon élite al click here que queremos introducir los genes de autofloración.

Las semillas feminizadas son aquellas que han sido manipuladas genéticamente para producir plantas hembras, mientras que las semillas autoflorecientes florecen automáticamente independientemente del ciclo de fuego.

Aunque los rasgos de autofloración de la ancianoía de las modernas variedades autoflorecientes son heredados de variedades/cepas de cannabis rudelaris

Cada tiempo que cruzamos una genética autofloreciente con una genética fotodependiente, en el híbrido resultante agrupamos el 50% de la genética de cada unidad de los parentales, o lo que es lo mismo, en cada cruce de este tipo se reduce la genética primitiva de Cannabis Ruderalis en un 50%, aunque que el parental autofloreciente solo cede al hijo la centro de su carga genética.

Las plantas autoflorecientes suelen estar listas para cosechar entre 8-10 semanas posteriormente de germinar las semillas, lo que significa coche cheese que puedes tener múltiples cosechas al año.